El trabajador comparte con un grupo de compañeros las funciones de herrero, balconero y yesero en el taller de Mantenimiento de la Secretaría de Administración
Tlalixtac de Cabrera, Oax. 14 de enero de 2020.- Hugo Leopoldo Hernández Hernández, integrante de la cuadrilla de Servicios y Mantenimiento del Gobierno del Estado, tiene la mayor motivación para trabajar arduamente, ser mejor persona y un esposo y padre ejemplar: sus hijos.
“Apoyarlos es mi principal motor; que se superen a diario, que estudien y logren una carrera profesional. Que alcancen todo lo que yo no tuve”, explica emocionado.
Hugo comparte con un grupo de compañeros las funciones de herrero, balconero y yesero en el taller de Mantenimiento de la Secretaría de Administración.
Con muchos años en el oficio, domina a la perfección las tareas de elaboración de puertas y diversas estructuras que se requieren en las oficinas de las dependencias o entidades del Gobierno del Estado.
Sus manos dan cuenta de los años de juventud en los que tuvo que trabajar labrando y soldando el hierro para pagar sus estudios. Fueron tiempos difíciles –reconoce– pero el fruto es la sabiduría que brinda el trabajo duro.
Hugo es incansable, disfruta de su ocupación y la realiza con mucha dedicación. Su labor inicia desde el diseño de las estructuras hasta la fabricación de cada una de ellas, pero también participa en las labores de mantenimiento de plomería, tablaroca, pintura e impermeabilización de los inmuebles.
En su jornada diaria lo acompañan el martillo, la máquina de soldar, esmeril, cortadora de metal, escuadra y otras herramientas que le ayudan a construir piezas con materiales como PTR, canal monten y ángulo.
“Las figuras ornamentales que se colocan en las festividades, las hacemos también aquí. Las dibujamos y luego convertimos ese diseño en una estructura que posteriormente se adorne con diferentes motivos”.
Su semblante cambia al hablar de su familia; su hija e hijo lo han convertido en una mejor persona. Decidió poner todas sus energías en impulsar sus sueños. “Lo mejor que les puedo dejar es buen ejemplo, valores y un buen estudio con el que progresen”, refirió.
Para ello, montó un taller de herrería en su casa con la finalidad de realizar trabajos particulares en su tiempo libre y beneficiar su economía familiar.
A pesar de la carga laboral, se da el tiempo para disfrutar junto a su esposa de los partidos de fútbol de su hijo mayor y los cursos de manualidades y ballet que tiene su hija, quien ha demostrado mucho talento para el arte.
“Me encanta compartir momentos con mi familia, mantenerme cerca de ellos, acompañarlos en los momentos importantes y enseñarles que esforzarse y trabajar duro, siempre será la mejor opción y siempre tendrá recompensas”, puntualizó.