Pan de muertos en Oaxaca, sobrevive al COVID-19
Oaxaca,Oax. El pan de muertos en Oaxaca, sobrevivió al COVID-19, ese pan en forma de cuerpo humano,redondo u ovalado, el de canela o mantequilla, también solo adornado de azúcar simulando peculiares bordados.
Pequeños y grandes, todos diversos dependiendo de la región,pero enaltecen y agregan a la riqueza de Oaxaca, de su gastronomía y acompañan esa taza de espumeante chocolate en esta temporada de la festividad de los fieles difuntos o Día de Muertos.
Sus precios oscilan entre los 10, 15, 30 y hasta 200 pesos, de acuerdo al tamaño y sabor. Todos lucen una carita en medio, elaboradas también de forma artesanal y con mucho tiempo de anticipación.
A escasas horas de la celebración, las panaderías cumplen con los protocolos para evitar los contagios en estos tiempos de pandemia y algunas recurren a la entrega a domicilio o entregan pedidos en hora determinada.
En Zaachila, comunidad de los Valles Centrales, ubicado a escasos 20 minutos de la capital mantienen intacta la tradición de vender el pan pintado con flores multicolores, llamativo y delicioso. Un pan que se elabora desde hace 150 años.
Mientras tanto en Tlacolula de Matamoros sus panes en forma de cuerpo y encima el ajonjolí, es uno de los más solicitados por toda la gente de los alrededores. Su sabor de canela es algo que lo hace único.
En Mitla sus grecas y tradición son plasmados sobre panes en formas ovaladas, pintan a mano cuál si fueran lienzos todo lo que la imaginación les permite.
No puede faltar el pan de yema de Santo Domingo Tomaltepec, reconocido por este delicioso pan que se cree tiene su aparición en el siglo XIX. En particular hay fuentes que se lo atribuyen a Manuel Mazza, un panadero italiano que vivió en Oaxaca.
Desde hace algunos días los hornos de leña recuperaron vida y dan calor a esos panes tan diversos de nuestro estado, le dan ese toque especial y hacen que el rico aroma llegue a varios metros a la redonda.