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Oaxaca. México hilvanó su segundo triunfo de manera consecutiva dentro del Grand Prix Mundial de Voleibol Femenil de Sala, al ganar 3-1 a Trinidad y Tobago por mangas de 22-25, 25-17, 25-19 y 25-10.
México volvió a sacar su nivel dentro del certamen mundial del Grupo B, para llevarse el triunfo, en el que Lizbeth Sainz fue la mejor en la cancha con 19 puntos, mientras que su compañera Dulce Carranza tuvo 14.
Por las trinitarias Krystle Esdelle sumó 15 puntos, mientras que Sinead Jack anotó 11.
En el transcurso del juego, Trinidad y Tobago tuvo ventaja en los puntos de bloqueo (15- 11), pero México fue superior en sus servicios (5-4) hasta poner la ventaja en el marcador final ante un debutante equipo caribeño.
Esta fue la primera vez que ambos conjuntos se ven las caras en este tipo de competiciones, sin embargo, los equipos se han enfrentado cuatro veces en el Campeonato Norceca, donde el cuadro mexicano ha salido airoso.
La mexicana Andrea Rangel consideró que la segunda victoria del conjunto nacional en el torneo fue gracias al entendimiento y rendimiento de sus compañeras.
«En el primer set no tuvimos la concentración necesaria y Trinidad y Tobago con su bloque fuerte nos acabó. Ha mejorado mucho y eso se ha visto en los juegos que han sostenido, pero gracias al empeño de mis compañeras se ganó”, expresó.
Abundó que el objetivo de este torneo es ganar todos los partidos como anfitriones, “el esfuerzo del equipo fue la clave para obtener un segundo triunfo consecutivo”.
El entrenador Ricardo Naranjo sostuvo que el equipo realizó un gran esfuerzo para ganar el partido ante un inmueble extraordinario con el apoyo de la afición.
«Mi equipo ha hecho un gran esfuerzo para jugar bien y no decepcionar como anfitriones. Espero que podamos terminar con otra victoria”, señaló.
Mencionó que el equipo de México necesita sacar el máximo provecho de esta experiencia porque no es frecuente tener rivales de alto nivel para mejorar en el juego.
