Es el árbol que cobija cientos de eventos culturales y artísticos de la entidad y data desde 1875
Colaboración Miguel A. Luna
Integrantes de la Coordinadora de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca (COAO) alzaron la voz de alerta ante la posible plaga del gusano barrenador que presenta el laurel ubicado en una de las jardineras del lado norte del Zócalo de la ciudad.
En ese espacio, cientos de oaxaqueños disfrutan día a día de su sombra, y que es sede de eventos culturales, educativos, muestras de danza y conciertos denominados “Bajo El Laurel”.
Gerardo Aldeco Pinelo, integrante de la organización Peatón Vigilante señaló que notaron la presencia de orificios en la corteza del laurel después del 16 de septiembre, días después de que habían realizado un recorrido para verificar la manera en que trabajadores enviados por la Secretaría de Administración del Gobierno de Oaxaca abrieron unas cepas que lastimaron las raíces de los árboles, inclusive sembraron plantas y flores que requieren de mucha agua por lo que a la larga va a afectar al arbolado del zócalo.
Lamentaron que no hayan seguido la sugerencia de sembrar plantas endémicas de temporada para que de manera permanente este sitio público estuviera lleno de colorido sin tener que quitar y poner plantas a cada rato, “esto es un derroche de dinero que solo favorece a unos cuantos”, dijeron los ambientalistas.
Hoy, el árbol emblemático está infectado por el gusano barrenador que según ha explicado el investigador Francisco Verástegui, data de 1875 por una fotografía tomada por Teobert Mahler, impresa en su libro “Árboles Emblemáticos” y ahora está en peligro de morir.
El Gobernador Félix Díaz es quien sembró los primeros arboles del zócalo de la ciudad, decidiendo que fueran laureles porque para los griegos significaban el triunfo, (aunque estos son árboles de la India y los utilizados por los griegos son del mediterráneo.
La COAO en sinergia con el Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, en la Alameda de León han sembrado plantas de Jarilla, Magueyes y hecho gremios de plantas que no dañan los árboles antiguos, y ha resultado un éxito, concluyeron los integrantes de la Coordinadora de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca (COAO).
En una revisión esta mañana, por trabajadores de servicios municipales del ayuntamiento de Oaxaca, señalaron que el laurel está enfermo del gusano barrenador, ganoderma y una virosis que lo hace ver decaído, por ello el próximo lunes iniciarán un tratamiento especial para curarlo, concluyendo que tiene posibilidades de salvarse.