Monterrey, México.- En el último año, Pemex prácticamente ha dejado de refinar gasolina Premium en sus plantas, suministrando a sus clientes y consumidores finales a través de importaciones de Estados Unidos, principalmente, pero incluso de países como España, Italia y Qatar.
En febrero pasado, de las seis refinerías que tiene Pemex sólo salieron a distribución 2 mil 90 barriles diarios de gasolina Premium, es decir, 1.8 por ciento de las ventas totales en dicho mes, que resultaron en 117.2 mil barriles diarios -unos 18.6 millones de litros por día-.
A diferencia de la Magna, la cual sí ha refinado en sus plantas, las ventas de la “roja” a nivel nacional han disminuido como efecto del alza de precios que inició en el 2017, lo que ha reducido las presiones de la petrolera de refinar e importar dicho combustible.
Por ejemplo, en febrero pasado, las ventas de la Premium cayeron 12.8 por ciento anual, a 117.2 mil barriles diarios, desde los 134.4 mil barriles al día que distribuyó un año antes.
Parte del problema de la refinación es que también la petrolera ha disminuido la distribución de crudo a sus plantas, pues en el periodo referido pasó de 980.2 mil barriles diarios a 526.5 mil barriles procesados, una baja de 46.2 por ciento.
Sin embargo, pese a una menor refinación de la “roja”, la mayor parte de las importaciones siguen siendo de Magna.
En enero, último dato disponible de la Secretaría de Economía, de 592.6 mil barriles diarios importados, el 23.2 por ciento fue sólo de Premium.
De dicho volumen, el 93 por ciento provino de Estados Unidos y el resto de Holanda.
Una fuente cercana a Pemex detalló que la producción de Premium comenzará a subir “levemente” con las nuevas reconfiguraciones en las plantas de Madero, Tamaulipas, y Salina Cruz, Oaxaca, pues también están concentradas en la refinación de diesel de ultra bajo azufre.
“Tiene más presión Pemex por sacar a flote los clientes en diesel y cumplir, al mismo tiempo, con la norma de calidad de los combustibles de la CRE (Comisión Reguladora de Energía), para reducir también la producción con exceso de azufre, que es de la mitad del que produce”, planteó.
Se estima que para finales de abril y principios de mayo la refinería de Madero reinicie sus actividades, luego de una fase de mantenimiento en la cual actualmente está sin producción.
De las seis refinerías, que tienen capacidad máxima para procesar y refinar 1.6 mil barriles diarios, en operación sólo se utilizó el 32 por ciento en febrero.
* Reforma / Luis Valle